Las mujeres estamos en una nube de felicidad a la hora de dar a luz y al fin ver a nuestro hijo en brazos, pero, ¿qué hay después del post parto? Hay un silencio enorme del que muy pocos se atreven a hablar abiertamente acerca de este tema. El post parto, es el tiempo que va desde el final del parto hasta que se produce una regresión completa de los cambios que sufre la mujer.
El post parto suele durar seis semanas, pero va a depender de cómo se encuentre la mujer por lo que es probable que en muchos casos se prolongue en el tiempo esas seis semanas, has de saber que este tiempo se conoce como ‘cuarentena’. Con la llegada del bebé al mundo, se produce un cambio hormonal en la mujer y en ocasiones, desencadena en cambios físicos, psicológicos y en otros casos puede sufrir depresión.
Como consecuencia de este cambio hormonal que hemos mencionado, es normal sentir cansancio después de dar a luz, o no poder hacer otras cosas que en nuestra rutina era habitual, pero no te preocupes porque es muy común hablar de temas que afectan a la mujer, como por ejemplo, sentir mareos la primera vez que nos levantamos después de dar a luz. En este proceso, es importante que te apoyes en tu pareja, familiares para que te echen una mano cuando más lo necesites.
Una de las cosas que más afecta es la barriga tras el parto, nos preocupa nuestro aspecto físico pero más la zona del abdomen porque no sabemos si la barriga volverá a nuestro aspecto habitual o no. Debes saber que la barriga, queda como una bolsa recién vaciada y que no vuelve a su sitio, pero no te asustes, volverá más tarde ya que aún quedan algún que otro kilo que hemos adquirido durante el embarazo, las retenciones de líquido… Poco a poco, con una rutina de ejercicios el cuerpo volverá a su lugar habitual.
Los entuertos, son esas contracciones uterinas dolorosas, así es como suelen describir muchas mujeres como unas contracciones de parto, y estos dolores son causados los primeros días después de haber parido. ¿Existe algún método para combatirlos? Te dejamos unos consejos para aliviar los dolores de los entuertos en el post parto.
Orinar de manera contundente ayuda a que la vejiga esté distendida y llena de orina y lo que hace es que dificulta la contracción uterina y realiza unos entuertos más dolorosos.
Masajear lentamente el útero cuando no se presenta la contracción post parto entuerto, el espasmo del útero es más continuo y cuando se producen los entuertos fisiológicos suelen ser menos dolorosos o menos intensos.
En el anterior punto hemos mencionado masajear el útero, ahora, también sirve para aliviar el dolor aplicando calor.
El suelo pélvico, tras el parto es normal que esté debilitado. Es un conjunto de ligamentos y músculos que están situados entre el pubis y el coxis y estos se encargan en controlar, sostener en una posición correcta al útero, a la vejiga y al recto. En el post parto, es necesario que se tome un tiempo para recuperarse antes de poder volver al estado en que ha quedado tras el embarazo y el parto. A raíz de eso, es aconsejable hacer ejercicios sencillos con la pelota de fitness para que su tono y su fuerza vuelva a aumentar.
Tristeza postparto. Se habla muy poco de la tristeza que genera esta emoción de dar a luz, sin embargo, muchas madres experimentan la tristeza, ansiedad, irritabilidad durante los primeros días después del parto. Estos síntomas emocionales son muy recurrentes ya que puede estar relacionado con los cambios corporales, con el agotamiento, cambios hormonales… También, la necesidad de adaptarse al bebé, pero esto no es eterno, suele desaparecer estos síntomas emocionales a partir de una semana a dos semanas.
Dar a luz es de las cosas más bonitas e inigualables que la mujer siente y que no hay ensayo previo, pero sí hay una preparación para todo lo que está por venir. Toda ayuda es bienvenida para calmar las dudas de las madres en el post parto.
Lo más importante, en el post parto es confiar en ti y cubrir todas las necesidades básicas para ti y para tu bebé, ir conociéndoos en esta etapa. La dinámica de la familia es acogedora y crea un vínculo muy especial, además de la del padre, esa sensación nadie os la puede quitar.